My creative process is an exploration of both internal and external dialogues. I often begin with an abstract idea or emotion that evolves as the work progresses. I work intuitively, allowing the painting to guide me and become part of a process of discovery. The iconography in my work emerges from spontaneous interactions with color, texture, and symbolic forms, creating compositions that express both the visible and the invisible.
Color plays a significant role in my work. I use a vibrant, saturated palette that generates intense contrasts, often reflecting emotional tensions or dynamics of the mind. For me, color is not merely an aesthetic resource; it is a language in itself, capable of conveying emotions and moods beyond words. With deep tones and immersive atmospheres, I invite the viewer to get lost in these emotional spaces and connect with them on an intimate level.
My paintings often depict figures of women without faces or with distorted features, hidden behind marks of paint. These masks are an analogy for how beliefs and social expectations can leave deep marks, especially on women, who often find protection or refuge behind these masks. The vulnerability of these faceless or masked figures reflects the complex layers between identity and self-perception, exploring what it means to embrace this emotional protection.
I work primarily in oil on canvas, addressing urban themes and creating dreamlike figures and landscapes that inhabit an ambiguous space between the real and the imagined, between certainty and uncertainty. Through these settings, I aim to capture the feeling of existing in an in-between space, inviting the viewer to reflect on their own experiences and emotions.
My works arise from the need to express what cannot always be clearly spoken: the power of the unspoken, emotional connections, and internal experiences. Each painting is an attempt to capture human emotions in a way that the viewer can feel, interpret, and make their own, transforming the personal into something universal.
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Mi proceso creativo es una exploración de diálogos tanto internos como externos. A menudo comienzo con una idea o emoción abstracta que se desarrolla a medida que avanza la obra. Trabajo de manera intuitiva, permitiendo que la pintura me guíe y se convierta en parte de un proceso de descubrimiento. La iconografía en mi trabajo emerge de interacciones espontáneas con el color, la textura y las formas simbólicas, creando composiciones que expresan tanto lo visible como lo invisible.
El color juega un papel significativo en mi obra. Utilizo una paleta vibrante y saturada que genera intensos contrastes, reflejando tensiones emocionales o dinámicas de la mente. Para mí, el color no es solo un recurso estético; es un lenguaje en sí mismo, capaz de transmitir emociones y estados de ánimo que van más allá de las palabras. Con tonos profundos y atmósferas envolventes, invito al espectador a perderse en esos espacios emocionales y a conectar con ellos a un nivel íntimo.
Mis pinturas suelen presentar figuras de mujeres sin rostros o con facciones distorsionadas, ocultas tras marcas de pintura. Estas máscaras son una analogía de cómo las creencias y las expectativas sociales pueden dejarnos huellas profundas, en especial en las mujeres, quienes a menudo encuentran en estas máscaras una forma de protección o refugio. La vulnerabilidad de estas figuras, sin rostro o enmascaradas, refleja las complejas capas entre identidad y autopercepción, explorando lo que implica acogerse a esa protección emocional.
Trabajo principalmente en óleo sobre lienzo, abordando temáticas urbanas y creando figuras y paisajes oníricos que habitan en un espacio ambiguo entre lo real y lo imaginado, entre la certeza y la incertidumbre. A través de estos entornos, busco capturar la sensación de existir en un lugar intermedio, invitando al espectador a reflexionar sobre sus propias experiencias y emociones.
Mis obras surgen de la necesidad de expresar lo que no siempre puede decirse con claridad: el poder de lo no dicho, las conexiones emocionales y las experiencias internas. Cada pintura es un intento de plasmar las emociones humanas de una manera que el espectador pueda sentir, interpretar y hacer suya, transformando lo personal en algo universal.